Tras enterarnos de la convocatoria de una huelga Estudiantil, para el jueves 11, desde Respuesta Estudiantil Las Palmas nos pusimos manos a la obra para trabajar y unirnos a dicha manifestación.
Las ganas no faltaron desde el primer momento para unirnos a una causa
que creíamos justa, la reclamación de unos derechos fundamentales que
poco a poco se están cargando, por la privatización encubierta de la
Educación Pública. Se preparó una pancarta con el lema de la nueva
campaña “Acaban con tu Futuro”, un estandarte con nuestro lema principal
“el mañana nos pertenece” y la bandera de nuestra delegación con los
colores amarillos y azules , acompañadas por las banderas enviadas desde
Madrid al igual que por la bandera española constitucional recogida en
nuestra constitución en el art.4.1.
A su vez se prepararon dípticos informativos con la campaña pasada, No a
la Fuga de Cerebros, acompañada cada uno con una pegatina.
El jueves llegó y poco a poco fueron apareciendo los miembros para
marchar, al llegar al obelisco vimos como la marcha había comenzado y
nos colocamos en la punta de atrás del todo, sin molestar a nadie
sacando canticos tales como: “estudiar a mi me va a matar y con usura,
educación basura” a la vez que la voz juvenil, respuesta estudiantil.
Al poco de hacer acto y desplegar nuestras banderas, una comisión de
estudiantes, se nos acerco para informarnos de que, nuestras banderas
incomodaban y que si no las guardábamos la cosa iba a pasar a mayores.
Ante la extraña petición, nuestras banderas siguieron ondeando y se
empezaron a escuchar canticos de fuera fascistas de la universidad, pese
a que no nos metimos con nadie y hablamos con educación y respeto. Es
entonces cuando desde lo lejos se avista una bandera anarquista que
corre hacia nosotros seguida de un nutrido grupo de personas (muchas de
ellas con demasiados años como para ser estudiantes) y comienzan a
agredirnos físicamente, con el resultado que ya todos saben.
Desde aquí queremos aclarar, que en ningún momento se trato de
boicotear el acto, sino todo lo contrario unirnos y apoyar a los
estudiantes de verdad por la lucha que nos concierne a todos, una
educación pública y de calidad.
Por todo esto, le pese a quien le pese seguiremos yendo allí donde se
defienda una educacion publica y de calidad. Ya os avisamos en Sevilla
que nuestras banderas no se bajan, sean las que sean las consecuencias.
Nos vemos en las calles.
¡El mañana nos pertenece!
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